El comercio internacional se define como toda aquella actividad económica en la que personas o empresas de diferentes países, realizan un intercambio de productos o servicios. Este intercambio involucra la compra; y venta de productos y de servicios.
Debemos tener en cuenta que este intercambio, involucra diferentes monedas, formas y medios de pagos, siendo los mismos a través de entidades bancarias. Todo dependerá de la confianza previa que cada una de las partes tenga con respecto a su contraparte.
La globalización, y la posterior eliminación de una gran cantidad de barreras arancelarias permiten un aumento que año a año se ve reflejado en aquellas empresas y países que apuestan al comercio internacional.
También el marketing internacional ha logrado aportar su granito de arena, ya que las nuevas tecnologías y la utilización de RRSS ayuda a que cada vez más empresas estén presentes online; ofreciendo sus servicios y productos.
¿De qué dependerá el volumen de operaciones internacionales que un país tenga?
En Economía internacional, existen dos tipos de países.
Aquellos que aplican un menor control de ingreso (tanto barreras arancelarias como no arancelarias) y los que aplican un mayor control con el fin de proteger su producción local.
Las primeras son conocidas como economías librecambismo; mientras que las segundas como economías proteccionistas
¿Cuándo comenzó el comercio internacional?
Hace más de 10,000 años, cuando las personas de diferentes pueblos decidieron obtener mejores productos de los pueblos de alrededor. En aquel momento la única divisa posible era el trueque.
Lógicamente que a medida que el volumen de operaciones se fue incrementando, fue necesario crear entidades, bancos, organizaciones que regulan las actividades, Aduanas, etc etc.. Pero esto dejémoslo para otro artículo…
¿Cómo nos beneficia este intercambio comercial?
El comercio internacional es una herramienta clave e irreemplazable que los países tienen.
¿Porque?
La respuesta es simple y concreta: No existe ningún país en el mundo que sea capaz de producir Todo lo que sus habitantes necesitan consumir.
Pero vamos a desarrollar un poco más esta idea para que quede claro. Partamos de la base de elegir un producto: El petróleo por ejemplo
Todos sabemos que es un producto fundamental para cualquier economía, lo utilizamos para la energía y para el transporte. Sin él no podremos ni trasladarnos ni poner en marcha las máquinas para fabricar.
Ahora bien, siguiendo la idea de querer producir todo. Entonces nuestro país debería primero obtener petróleo para luego producir. Ya te estás dando cuenta que esto es imposible, no?
Por eso es que lo que los países hacen es, comprar / importar aquellos productos en los cuales no tienen facilidades de producir/adquirir, y de esta manera pueden dedicar mayor tiempo a definir los productos a vender/exportar.
Siguiendo con nuestro caso imaginario, el país debería de buscar un proveedor internacional de petróleo, cerrar una compra que le permita abastecerse por un tiempo determinado. Y luego si, comenzar a intercambiar con el exterior otros países que le permita conseguir las divisas para pagar los productos y servicios que adquiere.
Por esto es que todos los países importan y todos los países precisan exportar.
Por un lado necesitan adquirir productos o servicios que no les conviene fabricar localmente, sea por costo o por especialización, y comercializar con otros países aquellos productos que son su fuerte de fabricación, sea por poseer el clima o la tierra ideal para cultivar, sea por tener costos de mano de obra más económica o mejor calificada, etc.